sábado, 28 de septiembre de 2013

Non é necesario comentar, pero interesante ler


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5 comentarios:

María Concepción López Martínez dijo...

Nuestros ancestros le daban gran importacia a la siesta, al descanso en general, ¿por qué sería?.
Los niños de hoy en día, con tanta variedad y cantidad de actividades, parece que no tienen tiempo ni para respirar.
Nuestro cerebro necesita procesar y almacenar todo aquello que ha vivido, y para hacerlo no puede estar ocupado con otras actividades. La mitad del día es un momento perfecto para que el cuerpo descanse y que el cerebro se organice poco a poco.

SCampoR dijo...

Dormir es bueno para todos
Para los niños, sobre todo, pero un adulto que no ha dormido el tiempo suficiente (para lo que requiera su orgamismo y dependiendo de las actividades que desarrolle)a cargo de un niño consigue que ambos no pasen un buen rato.

Unknown dijo...

Estoy de acuerdo con la investigación, porque cuando es bebé se pasa durmiendo todo el día y toda la noche, y despierta para comer. Y cuando despierta está muy activo. Luego van al colegio y duermen solo por la noche. Es un cambio muy grande para ellos. Por eso aconsejan los médicos que se duerma una siesta de 15 minutos en adultos. Pero también hay que saber que no todos somos iguales. A unos nos sienta bien dormir y a otros le sienta mal. Se debe dormir lo mínimo de siesta, si se quiere rendir en los estudios o en el trabajo.

Laura Fernández dijo...

Después de haber leído este texto, he de decir que estoy de acuerdo con la psicóloga Rebecca Spencer, y más aún cuando hay estudios que demuestran, que es necesario dormir para obtener un mejor rendimiento académico.
Considero importante que las familias respeten las necesidades de sueño que tienen los niños/as y también en la escuela, hay que plantearse la necesitar de dormitar entre tareas, pues ayudamos a restablecer la actividad.
En las aulas de EI, y sobre todo con los más pequeños, niños/as de tres años, es necesario tener ritmos de descanso acompañados de un clima que propicie el sueño, y con niños más mayores considero necesario dejarles un tiempo abundante para realizar actividades de relajación, sobre todo después de la hora de comer y a última hora de la tarde, que es cuando más cansados están.
Estoy de acuerdo con la frase final “Los niños no solo deben tener la oportunidad de dormir, sino que se les debe animar a hacerlo”, debemos motivarles con actividades como: poner y recoger el espacio en el que van a descansar, arreglarse después de dormir, saludarse y despedirse, antes y después de la siesta…
En mi opinión, para que los niños puedan tener un estilo de vida saludable, considero importante el descanso y sueño de los mismos, por ello debemos respetarlos.

Unknown dijo...

Durante toda la vida hemos visto como las familias ponían a sus bebés a dormir la siesta. En este estudio realizado en EEUU, se han reafirmados sus beneficios, entre ellos podemos decir que los niños que duermen la siesta recuerdan mejor lo que están aprendiendo y les ayuda a reponer la energía consumida durante el día para no llegar al agotamiento y de este modo reponer fuerzas.

En el artículo nos dicen que “debido al aumento de guarderías, existe una corriente defendida por algunos padres, que pone en duda los beneficios de la siesta en los centros educativos. El motivo es que muchas investigaciones destacan los beneficios de una educación temprana, por lo tanto, la siesta la quieren eliminar para dedicar más horas al aprendizaje”.

Ya pensaba que las exigencias de algunos padres para con sus hijos eran exageradas, pero quitarle a un niño menor de 3 años la siesta para dedicar más horas al aprendizaje ya me parece el roce a la locura. Los bebés necesitan muchas horas de sueño, creo que lo adecuado ronda entre las 16 horas de sueño a 20 horas más o menos, es un proceso de adaptación al medio al que acaba de llegar el recién nacido y forma parte del desarrollo evolutivo del bebé. A medida que el niño va creciendo el número de horarios de siesta se va reduciendo, pero de todos modos se dice que es beneficioso incluso para los adultos dormir una pequeña siesta, en muchos casos de adultos no es posible una siesta por los horarios laborales. Pero no le quitemos al niño la siesta que forma parte de su desarrollo como se a dicho antes y además hay estudios que demuestran sus beneficios. De modo que cada etapa tiene su momento, así que dejemos que los niños descansen las horas que necesitan, al mismo tiempo que poco a poco van adquiriendo conocimientos acordes a su nivel cognitivo y madurez.

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