http://sociedad.elpais.com/sociedad/2013/11/19/actualidad/1384865013_341305.html
Creamos este blog de blogs coa intención de que sexa un espazo útil para tod@s docentes, pero en especial para @s estudantes do segundo curso de Educación infantil. Nel recolleranse recursos para traballar a Educación para a saúde no aula. Ao ser un blog colaborativo o resultado final resultará da suma e da interrelación do traballo de tod@s. A opinión d@s lector@s tamén é importante; esperamos que as compartades deixando algún comentario. Un saúdo.
35 comentarios:
Rotundamente NO, los celos no son una muestra de amor. Y para quien lo piense, debería empezar a plantearse que se hallará en un grave problema. Los celos son señales de inseguridad y pueden llegar a ser muy dañinos para el que los sufre y para su pareja. Es una emoción más, tal como el miedo, la alegría, la tristeza… Al igual que cualquiera de ellas, pueden brotar en cualquier momento. Lo importante es tener el autocontrol, capacidad y habilidad de detectarlos y no dejarnos llevar por ellos.
Lo que resulta escalofriante de esta noticia es que 7 de cada diez personas, interpreten los celos como una señal de amor, y que además esas personas sean adolescentes, personas que se hallan en un momento de formación de la personalidad. Esto lleva a plantear la pregunta de qué valores estamos inculcando en nuestros niños, qué es lo que están viendo, qué es lo que están imitando. Tristemente, cada pocos días, comunican en los medios de comunicación la muerte por violencia de género de una nueva víctima. Posiblemente, muchas (y hablo en femenino porque la cantidad de mujeres muertas a manos de sus parejas, es mayor que el de hombres) hayan considerado que el que sus parejas fueran celosas querría decir que las querían más y que su forma de demostrarlo era maltratarlas. Estas mujeres están dañadas en su autoestima, en su confianza en sí mismas. Además en estas parejas, la mayoría de las veces, también se daña a terceros: los hijos. Estos niños crecen en un ambiente muy poco adecuado, con un clima de desconfianza y miedo, y existen investigaciones que señalan que en el futuro serán posibles maltratadores.
Desde la escuela, y como se comentaba en el aula en las clases teóricas, deberíamos trabajar valores relacionados con estos temas, reforzando autoconcepto y autoestima, la tolerancia y el respeto, aprender a controlar las emociones y que no nos desborden y lleguen a ser dañinos en un futuro. En infantil, los celos pueden manifestarse en momentos como el nacimiento de un hermano, o incluso dentro del aula con otros compañeros. Enseñarles a controlar esa emoción en edades tempranas considero que es fundamental para un desarrollo óptimo. Hay que enseñarles a expresarse, a decir lo que sienten y a ponerse en el lugar de los otros.
Estoy totalmente de acuerdo con Cris. Los celos no son una expresión de amor, sino de inseguridad. Desde mi punto de vista, las parejas deben crecer en un ambiente de confianza y respeto mutuo y no entre celos y desconfianzas.
Los celos son un sentimiento como otro cualquiera, pero un sentimiento que nos daña a nosotros mismos y a las personas que nos rodean.
La sociedad está dando marcha atrás en estos temas. Cosas que ya pensábamos olvidadas vuelven a surgir en la actualidad y las relaciones de pareja vuelven hacia atrás. Hace dos años comentábamos en una clase que los jóvenes de ahora se están volviendo mucho más machistas que antes, intentando controlar mucho más a sus parejas. A mí sinceramente me aterró pensar que, según vamos avanzando y aprendiendo más cosas del mundo y de nosotros mismos, volvemos a cometer los mismos errores del pasado una y otra vez. Es escalofriante el camino que estamos recorriendo.
Está claro que nosotros, como docentes, tenemos que intentar cortar este tema de raíz desde el principio. Considero más que necesario trabajar con los niños el tema de la autoestima ya que, si yo me valoro lo suficiente y me quiero tal como soy, no tendré por qué sentir celos de otras personas en ninguna faceta de mi vida. Pero, además, también tendremos que enseñarlos a lidiar con las relaciones con los demás, incluida la relación de pareja.
Dejo otro enlace similar a este que justo estaba leyendo esta misma mañana y que contiene más detalles en estos aspectos: http://sociedad.elpais.com/sociedad/2013/11/19/actualidad/1384895182_866639.html
Yo estoy desconcertada. Pensaba que la POSESIÓN era cosa del pasado. Que era cosa de nuestros abuelos o tatarabuelos. Creía que la liberación de la mujer (salir de casa a trabajar, controlar la natalidad, compartir las tareas del hogar, etc) nos había ayudado a ser más independientes, a ser autosuficientes y a QUERERNOS más.
A favor de los HOMBRES hay que de decir que ahora nos comprenden más y que se INVOLUCRAN en todas las actividades familiares. Pero sigo desconcertada. En ocasiones ocurre al revés. Es la MUJER quien maltrata al hombre, más psíquico que físico, pero ha maltrato. Son menos los casos sin embargo también hay que tenerlo en cuenta y ayudar.
A veces pienso que eso de perder el estatus de PARTE DOMINANTE en una relación y, en consecuencia, en la sociedad, hace que se un ser sienta inferior y pretenda someter a los que tiene cerca (compañeros, hijos o a su pareja). En último término se traduce en VIOLENCIA: contra el prójimo o contra el extraño. Tenemos que aprender a ser TOLERANTES con todos.
Me gustaría recomendaros un libro. Es el de ÁNGELES CASO y se titula "CONTRA EL VIENTO". Es la historia de una mujer. Si empezáis a leerlo no os detengáis en el primer capítulo. Avanzad y os encontraréis con la realidad de los emigrantes, con la historia de una maestra, con sueños rotos y ... Leedlo. Os advierto, yo lloré mucho.
Un saludo
Susana CR
El dato que se afirma acerca de que 7 de cada 10 adolescentes aprenden que “los celos son expresión de amor” es un dato alarmante; pues se está concienciando a los jóvenes que los celos son algo normal en toda relación de pareja. Pero eso no es verdad. Los celos no nacen del amor, sino del temor y de la desconfianza. La persona celosa teme perder a la pareja y desconfía de ella continuamente; más que amarla la quiere poseer, como si fuese un objeto material. Incluso llega a controlarla y a mandar sobre ella. Los celos pueden llegar a convertirse en algo enfermizo, que afecta muy negativamente a la relación de pareja. Además la persona celosa se vuelve tan desconfiada e insegura que no puede disfrutar del amor que le está ofreciendo su pareja. Si uno ama de verdad a su pareja, tiene que aprender a confiar en ella y a no sentir celos.
Como afirma Díaz Aguado, en el enlace de la noticia, “Los celos no son una expresión normal de amor. El control voraz es un antecedente de la violencia de género y no podemos bajar la guardia”. Por eso es preocupante la actitud de muchos jóvenes que piensan que los celos es algo normal. En nuestra sociedad los celos son como una excusa que se le consiente a la pareja y que perpetúa el maltrato; así que urge detectarlos y desactivarlos.
La verdad es que cada vez más la gente utiliza la excusa de los celos para controlar a su pareja.
Estos son producidos en parte por sus propias inseguridades, pero también por desconfianza hacia la otra persona. Si se tiene una relación, esta debe estar basada, sobre todo, en la confianza, para que no haya problemas o discusiones por estas causas.
Estos celos a lo que llevan es al maltrato psicológico o físico, aún ayer, escuchaba en la radio cómo una chica contaba que a su mejor amiga, el novio le pegaba en la barriga (para que no se le notaran los golpes a simple vista), las amigas quisieron denunciarlo y la agredida dijo que no, que si estaba celoso y lo pagaba así con ella, era por algo, que era su propia culpa.
Llega un momento, es que tenemos que saber diferenciar si una relación es sana o no lo es, si hay o no confianza, y sobretodo saber cuando tenemos que dejar algo.
Los celos se pueden definir como un sentimiento de temor a perder a la persona amada, lo cual supone la existencia de una baja autoestima en la persona que los manifiesta. Datos como los que aporta este artículo de El País, “Siete de cada diez adolescentes aprenden que “los celos son expresión de amor””, resultan alarmantes. Desde mi punto de vista la afirmación de “los celos son una expresión de amor”, es impensable. Considero que éstos se producen por la falta de confianza en uno mismo, pues las personas inseguras muchas veces no se sienten merecedoras del amor de su pareja y esto les lleva a desconfiar del otro. La gente celosa, no vive su propia vida, es decir, siempre pensado y pasando miedo por si su pareja pueda conocer a alguien más atractivo.
Tanta familia como escuela, para prevenir estas situaciones en los más pequeños, y puesto que a estas edades imitan la conducta de aquellas personas adultas significativas para ellos/as, debemos transmitir modelos de conducta con respecto a este tema, pues un niño que haya presenciado escenas de celos en sus padres, posiblemente tenga más predisposición a ser celoso que otro que cuyos padres se sentían seguros el uno del otro.
Mi opinión es que en el tema de los celos influyen varios factores, como mencioné anteriormente la baja autoestima y también la traición anterior que sufre la persona celosa, pues es más probable que si sufres varias traiciones termines siendo una persona desconfiada y celosa.
Por ello debemos intentar sustituir los celos por sentimiento de seguridad y confianza para ayudar a frenarlos, debemos tomar conciencia del problema que suponen los celos e intentar detenerlos, ser más tolerante y respetar el espacio dentro de la pareja, sin agobios desmesurados.
Existen casos en los cuales los celos se convierten en patológicos, pudiendo darse indistintamente en hombres como mujeres, por ello debemos acudir a un profesional especializado en terapia de pareja, pues pueden ser destructivos impidiendo a la persona a ser feliz.
Estos datos no son buenos ya que esta información es peligrosa porque los celos no son ninguna muestra de amor.
Una persona obsesionada por otra no significa que la quiera más ni mucho menos, sino al contrario porque le puede causar graves problemas si no le hace caso.
El caso de las nuevas tecnologías como el whatsapp está destruyendo muchas relaciones por la “última conexión”. Esto es increíble ya que una simple hora puede llegar a obsesionarnos tanto como para empezar a desconfiar y esto llegara a la ruptura.
Si estamos con alguien tenemos que tener confianza en ella. No puede estar la otra persona 24 horas con nosotros ni nosotros estar pendientes de ella todo el día y saber qué hace en todo momento, porque eso llega a ser una obsesión y todo en exceso es malo.
Entonces debemos de intentar que bajen estos datos y no dejar que las nuevas generaciones piensen que los celos es algo bueno porque esto no demuestra el cariño ni la confianza a la otra persona.
En mi opinión, cada vez, las mujeres consienten más los celos de los hombres principalmente por un motivo: La inseguridad propia, que viene inducida por la sociedad en la que vivimos y la obsesión por el físico y lo material. Los principales sufridores de esto son los adolescentes, ya que todavía no son capaces de juzgar por ellos mismos que es bueno o malo para ellos en algunos aspectos y se dejan llevar o guiar por entes, modelos, famosos, programas televisivos y revistas que solo dañan su capacidad de ser originales y únicos. Estamos creando niños y niñas cortados por un mismo patrón, que adoran seguir la moda y critican a la primera a aquel que se sale un poco de los moldes estándar. Con esto, quiero decir que no se antoja difícil que cada vez seamos más celosos. Nos preocupa seriamente el hecho de que nuestra pareja pueda encontrar a alguien mejor, o que otra persona se interese en nuestro marido por miedo a que lo acabe convenciendo y nos lo arrebate. Todo esto solo son evidencias del miedo, falta de confianza en el otro e inseguridades propias. Para finalizar, decir que este artículo está un poco enfocadado a la violencia de género y al machismo, dos temas que precupan seriamente hoy en día, pero siento la necesidad de recalcar que esto también ocurre al revés, es decir, de la mujer hacia al hombre. Aunque puede que no en la misma medida.
Evidentemente, los celos forman parte del ser de las personas, incluso de algunos animales, pero cuando exceden son patológicos, dañinos, y en ningún momento son señal de querer a alguien, todo lo contrario, los celos patológicos son señal de inseguridad, dependencia, baja autoestima, etc.
Por otro lado, los adolescentes son más susceptibles a padecerlos que las personas adultas, en la mayoría de los casos debido a su inmadurez y a las formas disfuncionales de educación que son paradigma en las sociedades actuales, es decir, los estilos de educación por parte de los padres o profesores, estilos que en muchas ocasiones pueden llegar a ser autoritarios o negligentes, favorece que los adolescentes sean más débiles y se crean situaciones como estas.
Sin duda, la sociedad y el sistema educativo se deben de alarmar ante esta situación y muchas otras que se observan cada día en las aulas y los patios de los centros, sin ignorarlas y sin que pasen desapercibidas, puesto que pueden derivar en un mal peor y en la mayoría de los casos “EVITABLE”.
El titula dice: Siete de cada diez adolescentes aprenden que “los celos son expresión de amor”. ¿Esta es a la generación a la que estamos educando?, ¿qué clase de mensaje es el que están recibiendo?, ya que realmente este tipo de afirmaciones me parece muy graves. Hace que todo por lo que han luchado las “grandes mujeres” de nuestro pasado no sirva para nada.
En contra de que los celos con una expresión de amor, lo que realmente son, es una falta de seguridad y autoestima muy elevado por parte de las personas que los sufren. En muchos casos la otra parte de la pareja, la que sufre la consecuencia de los celos, estos terminan anulando a la persona por completo, considerando que si su pareja no la deja hablan non nadie, verter de determinada manera y otras muchas cosas, es por amos y si la maltratan es porque ha hecho algo malo.
Por lo tanto, me parece un tema vital para tratar en las aulas, reforzando la autoestima de los chicos y chicas, explicándoles que el amor poco tiene que ver con la represión del otro, la posesión y dominación, sino que el amor es sinónimo de cariño, buen trato, confianza, libertad, respeto por la pareja y buena comunicación. Siguiendo un camino saludable tanto en las relaciones con los demás, como en las de pareja.
En mi opinión los celos son una gran falta de seguridad y autoestima de la propia persona, creo que mucha de la gente que es celosa no lo es porque no confíe en su pareja sino porque no confía en ella misma, cree que cualquiera puede ser mejor que ella y por lo tanto su pareja encontrará a alguien mejor, creo que es un problema muy grave y qu elas personas que lo padecen deberían tartarlo ya que trae muchos problemas en una relación.
Por otro lado también están las personas que maltratan psicológicamente a su pareja, y en muchos casos esta no se da cuenta del daño que le causa, simplemente cree que su pareja es un poco exigente o un pcoo maniático/a con algunos aspectos.
Todo esto nace en la infancia, la falta de seguridad se va creando desde niños, por lo tanto como hablamso en varios post anteriores debemos tratar de crear una autoestima alta en los niños, además se debe enseñar muy bien que ndie te puede exigir como actuar, qu eres libre y que nadie debe manipularte, y sobre todo, enseñar a los niños a no callarse ante estas situaciones.
Cualquier muestra de control excesivo ante otra persona no es señal de amor ni aprecio. Es evidente que la confianza y el respeto son dos de los pilares básicos de una relación de pareja y esto hay que construirlo día a día. En ningún caso se puede tolerar la desconfianza infundada ya que si se desconfía de la pareja sin motivo aparente, la relación está vacía.
Es importante educar para que los más jóvenes se percaten de situaciones que son alarmantes y que pueden desembocar en graves problemas y de este modo lo comuniquen para tomar las medidas adecuadas.
Si creemos que los celos son sinónimo de amor estamos muy equivocados, ya que pueden convertirse en un problema mental muy grave que a veces traer consecuencias pésimas. Como decían muchas de mis compañeras los celos están detrás de complejos o problemas de autoestima que se proyectan en estas formas de actuar.
Me parece sorprendente que en pleno siglo XXI exista gente que crea los celos son una prueba fundamental de amor. En mi opinión considero, más bien, que son una prueba de desamor. Ya que los celos se generan en personas que tienen una baja autoestima, una falta de seguridad y sobre todo que no confía en sí mismo y por tanto desconfía en las personas que les rodean.
Los celos se generan en las personas cuando estas perciben una amenaza de perder algo que estas consideran que les pertenecen.
En mi humilde opinión considero que las personas que padecen esta enfermedad en su mente se proyecta la palabra infidelidad por parte de su pareja, pero sin que esta le muestre algún motivo. Estas personas se crean su propia película pensando que sus parejas les van a ser infiel e inician un interrogatorio diario hacia sus parejas. Sus parejas se sienten atrapadas y sobre todo acosadas, hasta el punto de tener que romper la relación por culpa de la enfermedad que padecen estas personas. Esta enfermedad se genera por una falta de confianza hacia sus parejas y resulta imposible cimentar una relación sin el pilar fundamental como es la confianza.
Los celosos padecen una desconfianza que genera que su nivel de autoestima disminuya, crean una frustración en ellos y provocan que la vida se sus parejas se conviertan en un “sinvivir”.
Esto que para algunos consideran prueba de amor de sus parejas, es el inicio de una enfermedad que desembocar en maltrato, tanto físico como psíquico. Por eso considero que cualquier persona debe acabar una relación cuando sienta desde el minuto uno un control de su pareja hacia ella, cuando perciba que no realiza determinadas acciones por culpa de su pareja y sobre todo cuando su pareja eleva la voz, o incluso la mano para recriminarle algo.
Por último, recordar que ninguna persona es dueña de otra. Por eso ante el mínimo indicio de celos enfermizos de tu pareja acompáñale un psicólogo con el fin de poner solución a esta enfermedad.
Creo que esta afirmación supone un retroceso a épocas en las que las mujeres se veían como un ser inferior, propiedad del hombre; que debe quedarse en casa cuidando de los hijos, que debe ir tapada hasta el cuello y los tobillos "para no provocar" y que debe estar pendiente de las necesidades de su pareja mientras este puede hacer lo que quiera, llegando incluso a serle infiel.
Criticamos mucho la situación de las mujeres en países musulmanes, pero no nos damos cuenta que en nuestras nuevas generaciones (muchas veces debido a las nuevas tecnologías) cada vez son más las situaciones de celos, maltrato psicológico, faltas de respeto, control excesivo, violación de la intimidad, etc.. Y luego nos extraña cuando vemos las escalofriantes cifras de mujeres muertas a manos de sus parejas y exparejas. Los celos, que muchas mujeres permiten, son el primer desencadenante de las situaciones de violencia de género y del trágico final de muchas de las mujeres maltratadas.
Por ello nosotros como docentes debemos llevar a cabo actividades de prevención de este gran problema. Para ello debemos trabajar muchísimo la autoestima de nuestros alumnos, para hacer de ellos personas seguras que no se dejen dominar ni pretendan dominar a nadie. Los celos suelen deberse a inseguridades por parte del que los tiene y por parte del que los consiente y sufre, por ello debemos trabajar mucho el tema de la inseguridad en las aulas.
Por último, quisiera citar una frase “vivimos en una sociedad en la que se enseña a las mujeres a cuidarse de ser violadas en vez de enseñar a los hombres a violar”, y esta frase quisiera aplicarla también al tema de los celos y del maltrato. Es decir, obviamente tenemos que prevenir esto aumentando la autoestima de las niñas, haciendo que se conviertan en mujeres independientes y seguras, que no se dejen avasallar y que no piensen que dependen de ningún hombre para vivir y ser felices. Pero con eso no basta, considero que la importancia está en inculcarle a los varones, desde muy pequeñitos, el respeto por las mujeres, la igualdad y la importancia de la confianza, tanto en las relaciones de pareja como en cualquier tipo de relación social. Y, evidentemente, acabar con la consideración de los celos como expresión de amor, enseñándoles desde un primer momento que sólo es una muestra de inseguridad y desconfianza.
Es lamentable ver como de cada diez personas siete creen que los celos es una demuestra de amor. Definitivamente, yo no estoy de acuerdo para nada con esta afirmación, al contrario, los celos nos demuestra nuestra inseguridad, nuestra duda, llegando a ser una enfermedad muy difícil de superar. Los celos, no es algo sano sino que puede llegar a hacernos sufrir a nosotros mismos y claramente a nuestra pareja. Es una emoción igual que el miedo, el pánico, la alegría. Además, los celos están en completa relación con los sentimientos como el miedo o el pánico a perder a esa persona tan importante en nuestra vida y para ello no defendemos con el arma de los celos.
Pensamos que gracias a los celos podemos estar más atentos de si nuestra pareja nos quiere verdaderamente o no, o incluso, demostrar que nosotros sí que lo queremos de verdad. Sin embargo, yo no pienso así, ya que los celos lo único a lo que nos lleva es a una ruptura final de nuestra relación y a que gracias a ellos podamos alejar a nuestra pareja aunque ella nos quiera con locura, ya que ninguna persona puede soportar que alguien lo controle debido a que este esté muerto de celos.
Por eso, nosotros como docentes debemos inculcar a nuestros alumnos que los celos no es algo bueno ni sano, y que debemos tener la suficiente seguridad de nosotros mismos y de nuestra pareja para no desconfiar de ella, o incluso, ya no en el ámbito de la pareja sino en el ámbito familiar, es decir, cuando un niño tiene un hermano pequeño o un primo mayor tiene otro
Que la cifra de jóvenes que piensan que los celos son una expresión de amor sea tan elevada es preocupante. Como ya han dicho muchos de mis compañeros, los celos son un sentimiento como otro cualquiera, pero debemos e aprender a controlarlos, a que no sean enfermizos. Tener celos denota una inseguridad propia principalmente, pero debemos saber cómo frenar esa inseguridad, como tratarla y como exteriorizarla de la manera idónea.
Los celos no deben ser jamás una excusa para el control sobre otra persona, debería de ser una excusa para controlarnos a nosotros mismos, para controlar nuestros sentimientos, aprender a canalizar estos sentimientos de una manera productiva, de la manera más apropiada puesto que los celos no solo nos incumbe a nosotros, sino también a otra persona, otra persona que tiene derecho a hacer lo que quiera y que no debe dejar de hacer cosas porque otra persona sea insegura consigo misma.
Esto se debería de trabajar ya desde Infantil, puesto que muchas veces los sentimientos son algo que no se trabajan y deberían trabajarse porque tener una vía de escape adecuada para nuestros sentimientos es la mejor manera de saber controlarlos, de exteriorizarlos de la manera correcta, de saber comportarnos correctamente en las distintas situaciones que nos podamos encontrar a lo largo de nuestra vida.
Otra de las cosas que se debería trabajar fijándonos en este artículo, es la autoestima. Alguien con una alta autoestima sabrá que nadie debe controlarla, que las personas somos libres y tendrá la valentía de decirlo y hacerse valer.
Es verdad que la mayor de la juventud tiene la concepción de que el amor duele.
Hace poco, en un programa de televisión entrevistaron a una chica víctima de maltrato por parte de su pareja cuando a penas tenía 14 años. Me resultó alarmante y bastante triste observar que casos así existen y que la violencia de género está aumentando incomprensiblemente en la adolescencia.
Sinceramente, no comprendo que niñas o adolescentes soporten y normalicen este tipo de conductas y de maltrato por parte de sus parejas.
Si es así, tal y como los datos lo demuestran, ¿qué falla?
Estamos en una sociedad “supestamente” más concienciada con la violencia de género, el papel de la mujer poco a poco ( aunque aún queda mucho) ha evolucionado a una mujer más independiente y, las campañas y educación van encaminadas al trato igualatorio, a la lucha de ideas, derechos y actos machistas y discriminatorios. Entonces, ¿porqué cada vez más aumentan los casos de violencia machista en adolescentes?
Son preguntas para las que no he encontrado respuesta. Pero si podemos como maestros intentar educar a nuestros alumnos en valores y tratos igualatorios y, sobre todo, en conocerse y valorarse porque si nos valoramos y queremos ( una buena autoestima) no dejaremos que otros nos maltraten y, sobre todo, educaremos a nuestros hijos en los mismos valores y no inculcaremos como dice la noticia ideas falsas y que atentan contra el derecho y libertad que todas debemos de tener.
Yo me quedo con la frase que la chica de la entrevista, después de varios años y tras una visión más real y adulta dijo: “ el amor no duele, si duele no es amor”.
Yo creo que frases, noticias y testimonios así te hacen reflexionar ya que tenemos ciertos conceptos asimilados como el que la mayor parte de la juventud entiende el amor como un estado que incluye también sufrimiento y, muy muy equivocados creo que estamos ¿no?
Rocío González Pérez
Los celos para nada son una expresión de amor. Creo más bien que son un síntoma de que una persona se siente con el derecho de posesión sobre otra, y esto le produce reacciones acaloradas cuándo la otra persona tiene relaciones sociales. Aun así, existen muchos tipos de celos y en muchos grados, que a medida que van siendo mayores, peor es la situación.
Creo que debemos educar a los jóvenes en un entorno que garantice y salvaguarde sus derechos como persona. El creer que los celos puedan ser algo bueno es necesario desterrarlo por completo. Según este artículo, la culpa no es de ellos en el proceso de asimilación de que los celos no son malos, sino de los adultos, que poco a poco van transmitiendo mensajes que van creando conciencia en los jóvenes, y que pienso que muchas veces se dicen sin pensar, y creyendo que no tienen transcendencia ninguna, pero que si que la tienen. Por lo que es necesario cuidar mucho lo que decimos y cómo lo decimos.
Manuel Borrajo Fernández
Totalmente impresionado con lo que he leído en esta noticia. Si reflexionamos sobre lo que dice, puede que en cierta medida los adolescentes si estén aprendiendo esta lección penosa de sus mayores, aunque en mi opinión, los celos son algo innato al ser humano.
Pensemos que como maestros debemos enseñar a gestionar este tipo de sentimientos a nuestros alumnos. Mostrarles que no son la expresión adecuada del amor, y que más bien es todo lo contrario, pues radican en una sensación de odio y control hacia la otra persona.
Si no hacemos esto, pues la violencia de género se eleva con todo lo que implica, que en numerosas ocasiones es la muerte de la víctima.
Educar en el respeto hacia todos, ese debe ser uno de nuestros lemas en el aula.
También podemos desarrollar actividades que reflejen las consecuencias nefastas que pueden acarrear los celos y las acciones motivadas por ellos, para concienciar a nuestros alumnos de lo peligrosos que pueden llegar a ser.
Por supuesto, no podemos olvidar que el ejemplo es una herramienta muy poderosa a la hora de enseñar, y si ven en nosotros mismo una actitud correcta, sin celos o resentimientos de algún tipo, facilitará nuestra tarea.
AITOR RUIZ RICO 44489967-D 2º.EDU.INF. EDUCACIÓN PARA LA SALUD
En este documento se muestra que muchos de los adultos creen que los celos son una prueba de amor. Personalmente, y creo que deberíamos admitirlo, sentirse celoso de otra persona es algo muy común en el ser humano. En una pareja, también se producen hasta cierto punto, pero para todo hay unos límites, y cuando se sobrepasan estos límites es cuando se producen las desgracias, en este caso convertidas en posibles indicios de violencia de género.
Cualquier relación sincera debe tener un pilar fundamental: la confianza. Aunque sea un tópico, también es una realidad y por lo tanto es la principal característica que debe estar presente para que dos personas puedan quererse mutuamente.
Cuando se producen celos en una relación, la persona afectada suele sentirse vigilada, diariamente controlada por su pareja, sin poder disfrutar de lo que le gustaría hacer, como por ejemplo salir con amigos, que es una de las principales situaciones de desconfianza, porque su novio o novia en muchos casos suele pensar lo que no es, lo que es muy agobiante para el afligido o afligida, por lo tanto a éste o ésta se le priva de sus entretenimientos. Llegados a este punto de intensivo control, yo personalmente creo que la persona afectada debería cortar por lo sano, es decir, dejar esta relación tan desesperante porque, estando así, no se siente feliz, lo que es una contradicción, ya que un noviazgo supone situaciones de felicidad, situaciones de estar a gusto con la persona que quieres, y de esa manera no lo está consiguiendo.
Por lo tanto, pienso que deberían desparecer este tipo de situaciones, sobre todo por la seguridad de las personas, y deberíamos incentivar a la sociedad para que estas cosas no ocurran y para que las relaciones puedan ser auténticas.
Los celos son algo consustancial a nuestra existencia, son sentimientos que alguna en la vida todos podemos experimentar pero debemos tratarlos desde muy pequeños para que aparezcan de una forma normal y que no invadan a la psiquis de quien los sufre para que éstos no marquen sus relaciones.
La clave está en aprender a distinguir entre celos patológicos y celos normales, en no negar que nos sentimos celosos, analizar las causas reales de este sentimiento y hablar de ello.
La primera situación para trabajar con estos sentimientos tan peligrosos puede darse muy temprano, por ejemplo cuando nace un hermano pequeño.
Es tarea de los padres enseñar a sus hijos que ellos, su figura de apego, siguen queriéndole y que no van a partir su cariño en dos cuando nazca el nuevo hermanito.
Lo importante es que a lo largo de todo el proceso de desarrollo y no solo en situaciones que provoquen celos, los padres enseñen a sus hijos que la persona amada no es un objeto exclusivo que les pertenece, que tiene intereses propios y libertades individuales y que esto no implica un engaño o una traición.
Si les enseñamos esto desde pequeños,en el momento en el que aparezcan los celos ellos mismos tendrán las estrategias y la inteligencia emocional necesaria para saber manejarlos.
Además, los hijos de padres afectuosos tienden a ser menos celosos en la adolescencia y en la edad adulta porque han creado un apego seguro que les ayudará a tener una buena autoestima y a poner en práctica su capacidad de raciocinio cuando sientan celos.
Creo que los celos en la adolescencia se tiñen de dramatismo y sufrimiento porque es una época de muchos cambios físicos y psicológicos. Además, los celos en esta etapa pueden dar lugar a celos patológicos en la edad adulta, por lo que tenemos que abordar el tema a edades muy tempranas.
Por otro lado es importantísimo enseñar a los niños a que se quieran a si mismos para poder tener relaciones basadas en la confianza y el respeto mutuo y que el día de mañana no sean personas dependientes con el fin de poder afrontar las pérdidas, que son, al fin y al cabo, lo que provoca los celos.
Aún así y viendo este artículo, creo que también los padres deberían aprender que los celos no son una expresión de amor si no que son sentimientos ansiosos que nunca traen buenas consecuencias.
Me parece una noticia alarmante. Por un lado pienso que los celos son un gran problema para una relación y que no se deben consentir. Lo principal de una relación es la confianza en la otra persona y si no la hay, no puede existir amor. También es cierto que debajo de las personas celosas solemos encontrar personas con una baja autoestima (aunque pueda parecer lo contrario) y pocos seguros de si mismos. Por ello pienso que es primordial tratarlo para poder disfrutar de la vida en pareja. Como futuras docentes esto se puede tratar, trabajando la autoestima y que cada uno de los niños de la clase se valoren.
Por otro lado, que casi el treinta por ciento de las chicas adolescentes reconozca haber sufrido distintas formas de control abusivo me parece terrorífico. Considero que esto va en la educación y al igual que los celos hay formas de prevenirlo ya desde infantil, tratando la autoestima, creando personas que se sepan apreciar a ellos mismos y que sepan apreciar a los demás y educando en la igualdad.
Lo que más me llamó la atención de la noticia es que los chicos empiezan las relaciones antes que las chicas, me sorprendió ya que a pesar de que los chicos maduren más tarde “se siente preparados para empezar una relación”.
Lo más alarmante de la noticia, sin duda alguna, es que ocho de cada diez adolescentes no se sientan felices con sus novios o novias.
El amor es un sentimiento relacionado con el afecto y el apego, que resulta de la suma de diferentes actitudes, emociones y experiencias. No es malo tener celo cuando mantienes una relación interpersonal ya que son una respuesta natural cuando te sientes amenazado ante el hecho de perder dicha relación. Los celos están presentes en todas las personas (aunque digamos que no lo somos) y no son malos siempre y cuando lo que se demanda es algo que se hace sobre una base de equidad en la pareja.
Con lo que hay que tener sumo cuidado es con los celos patológicos, que se pueden manifestar tanto en hombres como en mujeres. Este tipo de celos, además de provocar angustia e infelicidad, puede llegar a provocar una respuesta física de agresión desmedida.
Para prevenir este tipo de celos debemos enseñar a los niños desde pequeños lo valores de la tolerancia (respeto por los pensamientos y las acciones de terceros cuando resultan opuestos o distintos a los propios), el respeto (atención o consideración) y el reconocimiento de los derecho de la otra persona.
Esta noticia me resulta alarmante, pero por otro lado no me sorprende, porque en mi opinión aún sigue estando presente este tipo de pensamiento en la mayoría de la gente. Lo peor es que los más mayores se lo transmitan a los jóvenes haciendo que ellos tengan también esta manera de pensar.
Por supuesto yo no estoy de acuerdo con esta afirmación, yo creo que los celos no son una muestra de amor, al contrario, son una muestra de desconfianza en la otra persona, ya que si se confía en el otro no tienen porque darse los celos. Por eso, si no hay confianza en una relación es mejor no continuar con ella, porque lo más probable es que no acabe bien.
Como comentaba, estas frases aún se oyen mucho, como también es muy corriente oír "Algo haría" cuando ocurre la violencia de género, algo que me parece todavía más grave.
Por eso me parece muy importante enseñar a los niños valores como que deben respetar a todo el mundo, fomentar el diálogo ante la violencia.
Resulta increíble que en pleno siglo XXI existan personas que crean que los celos son un símbolo de amor hacia la pareja, desde mi opinión no lo veo así, el amor es un sentimiento que se puede expresar a través de formas diversas, pero desde luego que los celos no son una de ellas.
Como revela la noticia periodística, es un alto porcentaje el de adolescentes que han recibido alguna vez en su vida el mensaje de que “los celos son una expresión de amor”, aquí podemos observar lo importante que es la información que transmite el adulto al niño y cómo ésta influye sobre sus conductas.
Una de dichas conductas podría ser la violencia de género, tanto de un hombre a una mujer, como de una mujer hacia a un hombre, para ésta última son menores los casos, sin embargo, los hay.
No comprendo ni comprenderé nunca cómo una persona puede creer que su pareja le pertenece, que tiene el control sobre ella, como si de un objeto se tratase…
Otro de los problemas que se citan en el reportaje son las relaciones a través de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, como lo son el móvil y el ordenador. Considero que una relación de amor, amistad o familiar, debería desarrollarse en un cara a cara, conviviendo con el otro sujeto, compartiendo experiencias y realizando actividades conjuntamente, es decir, manteniendo una relación interpersonal plena, en la que ambas partes puedan comunicarse de manera adecuada. Sin embargo, esta comunicación está siendo bastante dañada en la actualidad por las redes sociales, pues incrementan una comunicación vía online, de tipo virtual y poco gratificante.
No me sorprende mucho la noticia, porque yo le tengo escuchado a muchos adolescentes esta afirmación "Si está celoso es que me quiere".
La verdad, no pensé que los porcentajes fueran tan altos, pero si me hacía una idea.
Me parece bastante triste todo esto, porque la gente que dice que los celos son na prueba de amor no es consciente de lo que es el amor realmente. Por los celos empieza el maltrato. Seguro que en los hogares que hay maltrato de género se piensa esto.
Esta creencia la transmiten la gente de más edad a los niños y a los jóvenes. No se a donde vamos a ir a parar, porque tenemos que mirar muy bien las cosas que les transmitimos a nuestros pequeños si no queremos que el día de mañana tengan problemas. El amor significa confiar en esa persona, sentirte bien con ella y estar a gusto, pero en ningún momento hay hueco para los celos.
Los celos es un sentimiento horroroso que hace que la persona que los padece esté muy mal por dentro y la pareja de esta persona esté igual o peor.
Todos podemos sentirnos algo celosos en algún momento, pero tenemos que aprender a controlarnos y no ponernos celosos a la mínima de tres. El amor más bonito es aquel en el que ambas partes están seguros de si mismos y aprenden a confiar en su pareja.
Estoy de acuerdo con lo que dice María Santa Cruz “La clave está en aprender a distinguir entre celos patológicos y celos normales, en no negar que nos sentimos celosos, analizar las causas reales de este sentimiento y hablar de ello”.
Todos hemos sentido celos alguna vez, es inevitable. Pero es verdad que hay que saber distinguir lo que son unos simples celos hacia tu pareja por algún motivo en concreto, por alguna situación que se pueda dar. Pero lo que no es normal es sentir celos enfermizos como los que padece mucha gente, que siente inseguridad de sí mismo y tiene miedo a perder a su pareja, se sienten celosos cuando su pareja habla con personas del sexo contrario aunque estos, sean sus amigos.
Esta situación se da sobre todo cuando esa persona es considerada atractiva y ahí es cuando comienza la inseguridad en la persona que siente celos y tiene miedo a que su pareja se sienta atraído por esa persona con la que tanto tiempo pasa.
Todos deberíamos ser capaces de pensar que hay que confiar en nuestra pareja, que si está con nosotros es por algún motivo y no vale la pena sentir celos porque eso nos desencadenará muchos problemas como perder a tu pareja por estos continuos celos y romper la relación por unos motivos inexistentes que es justamente lo que más temíamos, perder a la persona que queremos.
También nos puede dejar secuelas mentales y crear este mismo conflicto con nuestra futura pareja llevando todo al extremo y siendo demasiado confiado.
Sin duda los celos no son una expresión del amor si no que para mí son síntoma de que alguien te importa. Pero al tener unos celos desmesurados pasamos a no confiar ni creer en la persona que queremos y esto para mí, no es amor ni es nada,
Los problemas sólo llevan a más problemas y aunque es difícil que una persona celosa deje de serlo siempre se puede conseguir y lo más importante, es que nuestro hijos no reciban mala información de sus padres y crezcan pensando que tener celos es símbolo de amor.
Es alarmante las cifras mostradas en este artículo de “El País” que hablan sobre el ciberacoso.
Hace poco leí una noticia en la que decía que un joven gallego había sido denunciado por su pareja por recibir más de 300 whatsapps diarios acosándola constantemente y como consecuencia se estaba viendo la posibilidad de que este chico pudiera ir a la cárcel por ello.
Esto, sin duda alguna, es culpa tanto de la educación de la persona como del poder enfermizo y controlador de las redes sociales como whatsapp que marcan la hora de la última conexión, si estás en linea y esto genera todo tipo de preguntas como: ¿Me estará leyendo?, ¿ Por qué no me contesta?, ¿ Qué quiere decir con esto?, ¿ Lo dice en tono irónico?...
Además de controlarnos la hora, no nos permite expresar con claridad lo que queremos decir, no se puede expresar nada en tono cómico y tampoco se ve bien reflejado el sarcasmo.
Hay que hacer algo y tomar medidas esta situación que considero que cada día va a ir de mal a peor.
Esta es una noticia alarmante, saber que siete de cada diez adolescentes consideran los celos como una expresión de amor, cuando lo que en realidad son es una muestra de inseguridad, de falta de confianza…que destruyen y acaban con parejas y matrimonios más a menudo de lo que creemos.
Considero que las nuevas tecnologías (redes sociales), no son el mejor medio para hablar con nuestra pareja, ya que como no podemos expresar nuestra emociones, muchas veces se mal interpretan las palabras y sus significados. Estoy muy de acuerdo con mi compañera Marta en lo relacionado con el whatsapp y sus inconvenientes.
Creo que los celos también se pueden dar cada vez a edades más tempranas debido a que las adolescentes cada vez tienen relaciones a edades más prematuras, por lo que aún no son chicos/as maduros y los llamados “cuernos” son constantes, lo que hace que al llagar a edades más adultas se cansen de estas “infidelidades” y desconfíen de todo lo que se hace o dice.
Debemos de confiar más en nuestra pareja, ya que si estas con alguien es porque ambas partes se quieren sino nadie les obliga. Vivamos la vida felizmente y no de forma amargada y a la defensiva.
Los celos, en contra de lo que se dice en libros, películas o habladurías, no indican cuánto se quiere, se necesita o se desea a la otra persona. En muchas situaciones de celos hay, más que amor, otras causas: sentimientos de posesión del otro, de necesidad de controlarle, de inseguridad en uno mismo... Y, normalmente, quienes padecen estos ataques de celos son personas muy centradas en sí mismas, que sólo se curarán saliendo de su autoencierro.
Aunque neguemos que no sintamos celos, todos alguna vez en nuestra vida hemos experimentado este sentimiento. Pero es necesario saber diferenciar los celos patológicos de los celos normales ya que sufrir celos de forma moderada es una respuesta emocional normal pero, sentirlos de manera exagerada y descontrolada lo convierten en algo patológico.
La diferencia entre ambos tipos de celos está en que en vez de preferir y desear que su pareja esté sólo con él o ella, las personas con celos patológicos, están exigiendo que su pareja no debe, bajo ningún concepto, mantener ningún tipo de relación con otras personas. De este modo, la relación se convierte en una relación de control, agobio y vigilancia continua, creando una relación de desconfianza que deja al “amor” fuera de juego.
Otro tipo de celos son los infantiles ("complejo de Caín"), que se manifiestan tras el nacimiento de un nuevo hermano. El niño, antes centro de todas las atenciones, se ve obligado a aceptar que debe compartir con el nuevo miembro de la familia el amor y cuidados de sus padres, muy especialmente de la madre, lo que hace que vea en el recién llegado un usurpador de su trono(por llamarlo de alguna forma), lo que puede provocar agresiones sobre su hermano.
Según los psicólogos, no es extraño que incluso el origen de estos sentimientos tan peligrosos que sufren los adultos provenga de secuelas de celos infantiles padecidos hace tiempo.
Desde el aula de Infantil debemos aprender a controlar y a conocer nuestras emociones, tema que no se lleva mucho a las escuelas y que en mi opinión podría erradicar muchos problemas( algunos de ellos graves) en un futuro.
Me parece una noticia realmente sorprendente y alarmante como dice el artículo. No me puedo creer que sean tantos los jóvenes que piensen que los celos son una forma de amor. En mi opinión, me parece algo totalmente fuera de contexto, ya que los celos hasta cierto punto siempre acaban siendo un factor de riesgo en las parejas.
Los celos aparecen cuando se tiene una autoestima baja, una inseguridad en si mismo, y sobre todo en tu pareja. La base de una pareja es la confianza y el respeto mutuo, si no confias en tu pareja, no puedes estar con el, ya que se van a empezar a ocasionar esos celos, que muchas veces no son necesarios.
Muchas veces como dijo mi compañera Caterin, los celos pueden ser querer tener una posesión hacia tu pareja,lo cual no es nada positivo.
Hoy en día con las nuevas tecnologías y en este caso con el conocido "Whast App", son más las parejas que no se fían el uno del otro, ya que cuando uno habla y el otro está en línea y no contesta, se puede comenzar una discusión absurda y sobre iniciar una desconfianza sin ningún sentido, y tampoco nos podemos olvidar que a través del móvil no podemos expresarnos con claridad, y que hay muchas cosas que se malinterpretan fácilmente. También es cierto, que las redes sociales ayudan, pero todo depende de las personas y de las parejas.
Por último considero, que los celos no son del todo malos, es decir, hay celos y celos, y hay muchas maneras de llevarlos a cabo. Si te importa alguien puedes empezar a sentir celos que no son del todo malos, lo que pasa que a veces esos celos pueden ir en aumento causándote daños psicológicos, así que debemos saber controlar nuestros impulsos y saber cuales son nuestros límites con nuestra pareja y que grado de confianza tengo que depositar en el.
Esta noticia me ha sorprendido mucho, sobre todo dos cosas, lo primero el titular, lo de que los celos son una expresión de amor. Lo segundo es que me parece escandaloso que ocho de cada diez mujeres no se sienten felices con su pareja.
Para empezar por el principio tengo que decir que los celos siempre han existido, pero hay muchos tipos de celos, pues una persona puede ser algo celosa y no tiene porque hacer daño o perjudicar a la pareja, si sabe controlarlo y lo lleva bien, es decir, si son celos sanos, pues todo el mundo en determinado momento puede sentirlos, ya sea con la pareja, como con la familia, amigos...
Sin embargo estoy en total desacuerdo con que sean una expresión de amor.
Una expresión de amor es un beso, un abrazo, una caricia, que te escuchen, te den cariño, te ayuden en los momentos en los que lo necesites... esto son expresiones de amor, pero no creo que una persona que te prohíba por ejemplo llevar una determinada vestimenta o no te deje maquillarte, o te deje en ridículo delante de los demás, etc. Esto no creo que pueda llamarse amor. Para mí pasaría a ser más como un control que tiene tu pareja sobre ti y eso no es amor. El hecho de que por un mínimo detalle que no tiene ni importancia el lo haga gigante y acabe con una discusión significa que son muchas las veces que eres infeliz por culpa de esto, te está mostrando desconfianza y eso no es amor, por eso creo que puedes tener algo de celos, pero nunca pasarte de la raya.
Sobre lo de que ocho de cada diez adolescentes no está feliz con su pareja, lo único que se me ocurre decir es que no lo entiendo, que si no eres feliz con alguien, lo lógico es que dejes a esa persona, pero no sigues con él si realmente eres infeliz, porque entonces no le veo el sentido a tener pareja si esta no te aporta todo lo que necesitas... pero bueno esperemos que con el tiempo aumente el número de chicas felices con sus parejas.
Sinceramente pienso que esta noticia es totalmente preocupante. ¿Los celos son una expresión de amor? Obviamente no. Es normal que en momentos circunstanciales sintamos celos hacia nuestra pareja o hacia cualquier otra persona es normal hasta cierto punto. Y digo hasta cierto punto de manera que no sea obsesivo. En mi caso, tengo dos hermanos más pequeños que yo y hace años se podían celar uno del otro, pero no es nada preocupante.
Me paré a leer algunos comentarios de mis compañeros, así un poco por encima, y estoy de acuerdo en lo que dicen muchos que es que los celos vienen provocados por una falta de seguridad en nosotros mismos. Pero en definitiva, es alarmante que en el siglo en el que estamos tengamos que leer noticias como esta...
Hoy en día es frecuente oír en las noticias casos de violencia de género y ciberacoso. Estas situaciones se dan mucho en adolescentes debido, entre otras, a la falta de concienciación y el mal uso de las nuevas tecnologías.
Este no es el primer artículo que leo sobre este tema, el cual me hace ver que las mujeres, inconscientemente, nos estamos volviendo más sumisas; sin embargo, esta información no es suficiente para que datos como estos disminuyan. No es la primera vez que comento este tema con alguien que le da la razón al artículo pero en la práctica tolera estas conductas por parte de su pareja e, incluso, las justifica: “lo hace porque me quiere, lo dice de broma, no compares lo del artículo con mi situación…”. Así que pienso que todas estas investigaciones deberían ir acompañadas de acciones que pongan solución a esta realidad, es decir, tomar medidas que conciencien a la sociedad sobre este tema y no solamente se limiten a mostrar datos.
Además de tomar medidas de solución, se deben tomar también medidas de prevención. Opino que una forma esencial para prevenir estas conductas es reforzar la autoestima, ya desde la primera infancia. Si las mujeres toleran los maltratos y creen que los celos son muestras de amor es por la falta de inseguridad en sí mismas. Por otra parte, también deberían educarse valores que le hagan ver a los niños que todos somos iguales y debemos respetarnos independientemente del género de cada uno, pero sobre todo debemos eliminar ese sentimiento de posesión que lleva a muchos hombre a creer que tienen poder sobre su pareja y que esta depende de él.
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